Virgen de Itatí, desde Tú lugar en el cielo, bendícenos, a quienes colaboran en este blog, a los que leen.
Bendice a los que estamos, a los que estuvieron y ya no están pero seguro que nos acompañan y a los que están en camino frutos del amor.
Por eso Madre de Itatí, por intermedio de Tú hijo Jesús el nazareno, ilumina nuestro camino, danos fuerzas y por sobre toda las cosas mantén la alegría en nuestras vidas.
Concédenos un gran amor a tú divino hijo Jesús, un corazón puro, humilde y prudente.
Paciencia en la vida, fortaleza en las tentaciones y Consuelo en la muerte así sea.
¡¡¡VIVA LA VIRGEN DE ITATÍ!!!
Ave María Purísima